Escurrir de vida entre sus dedos

No puede levantarse. Yace minúscula en su cama ocultándose del reloj despertador. Un hueco estomacal le pide piedad asomando angustia desde su aliento nauseabundo. Enciende un cigarrillo al incorporarse, su sombra vibra leve en la nebulosa nicotina que proyecta el velador. Ha enfrentado al tiempo, si acaso lo pretende inconciente, ha logrado cambiar el ritmo aunque más no sea para deprimirse.El cielo esta oculto en nubes grises frias de invierno matinal; la bocina de un auto se mezcla con el sonido de la alarma del reloj. Ladra el perro del vecino.Apaga la alarma nuevamente, esta vez no volverá a sonar. Sin ganas come cereales al pasar por la mesa de desayuno de los niños.Toma el telefono y llama a su trabajo.Gripe dice ella.Nosotros sabemos que es mucho más que eso. Vuelve a la cama con una taza de café. Un sueño la transporta a otra época, a cuando era feliz jugando con sus amigas a la pelota o andando en patines los domingos por la costa. Tanta distancia entre la vida, el sueño, el pasado y presente. Tan cerca de un futuro acelerado incesante, repugnante, caótico que la deja sin ganas de esperarlo. Los músculos se entumecen de no moverse. Suena el telefono. No atiende. Se levanta al baño, vuelve a la cama.Cubre todo su cuerpo, incluida la cabeza. Suena el telefono.Da vueltas en la cama.No atiende. Llegan los niños del colegio y sigue en la cama. Prenden la tele , dibujitos, hacen chocolatada por la ausencia de almuerzo. Ruido de propagandas que aumentan el volumen. Sigue en la cama. Suena el telefono, atiende Joaquin. _¡Mami es para vos, llama el abuelo! _¡Estoy durmiendo decile! _dice que está durmiendo abu _Decile que es importante que se levante y venga a atender _MAAAAAAA dice que es importante, que te velantes a tender!. Marcela se levanta a desgano y camina en puntas de pies por el frio del piso. _Hola _Marcela, tu madre murió , recién, acaba de confirmarme el médico del hospital, me llamaron hace una hora aproximadamente pero no podia hablarte , estoy tan.....que.... _................................................................ _¿Seguis ahi hija? _Si._Voy para allá. Marcela se viste de prisa. En la calle su cerebro en conflicto la abruma. Pensar que desperdicia vida en nada y a su madre no pudo donarle tiempo. La culpa la invadió, la de no saber vivir.